martes, 16 de julio de 2019

Dislexia


La dislexia es un trastorno neurobiológico que altera el aprendizaje de la lectura, lo cual pone en riesgo al paciente a presentar un bajo rendimiento académico. Éste es mayor cuando no se brinda el tratamiento  clínico y familiar apropiado, adicionalmente se acompaña de otros desórdenes cerebrales como la disgrafía y la discalculia. Con base en la Asociación Internacional de la Dislexia (2002), citada por Jiménez (2012), esta dificultad es definida como: 

«dificultad específica de aprendizaje cuyo origen es neurobiológico. Se caracteriza por dificultades en el reconocimiento preciso y fluido de las palabras, y por problemas de ortografía y descodificación. Estas dificultades provienen de un déficit en el componente fonológico del lenguaje que es inesperado en relación con otras habilidades cognitivas que se desarrollan con normalidad, y la instrucción lectora en el aula es adecuada. Las consecuencias o efectos secundarios se reflejan en problemas de comprensión y experiencia pobre con el lenguaje impreso que impiden el desarrollo del vocabulario» (p. 2).

Tipos de dislexia
  • Dislexia superficial: se caracteriza por presentar alteraciones en la ruta léxica o visual. Esto que quiere decir que, los pacientes sufren dificultades para leer palabras de manera global. Asimismo, con base en Jiménez (2012, p. 40), utilizan obligatoriamente la descodificación fonológica o descomposición de palabras para leer, ya sea que las reconozcan o sean nuevas para ellos(as). Por lo tanto, la lectura de estos niños tiende a ser lenta, silábica, se observa que retroceden en la misma, les cuesta seguir el ritmo y respetar signos de puntuación. 
  • Dislexia fonológica: se le denomina dislexia fonológica, debido a que la ruta lectora alterada es la vía fonológica. Con base en Jiménez (2012, p. 39), se caracteriza por una lectura dificultosa de palabras desconocidas o pseudopalabras, sin embargo pueden leer aquellas que sean familiares para ellos(as), sin importar su longitud. Ahora bien, esto se debe a unas alteraciones neurobiológicas, en concreto en el lóbulo temporal, que obstaculizan la relación entre el grafema con el fonema (sonido con letra y número), lo cual conlleva a una incapacidad para reconocer las letras. 
  • Dislexia mixta: se denomina mixta debido a que estos pacientes presentan síntomas de ambos tipos de dislexia, lo cual conlleva a una mayor severidad, debido a que ambas rutas (la vía léxica y fonológica) están alteradas.
Errores comunes (Narvarte, 2002, p. 20)
  • Rotación: hace referencia a la confusión de letras. Por ejemplo: confundir "b" con "d", "p" con "q" o la "u" con "n".
  • Inversiones: consiste en cambiar el orden de las letras de las palabras. Por ejemplo: "la" con "al", "el" con "le" o "los" con "sol". 
  • Confusiones: leer una palabra que no es la que está escrita. Por ejemplo: "grueso" vs "sabueso".
  • Omisiones: ocurren cuando el niño o la niña se saltan letras de la palabra. Por ejemplo: "casa" vs "cas" y "cama" vs "ama".
  • Agregados: se presentan cuando se añaden letras que no van en la palabra. Por ejemplo: "mesa" vs "mesases" y "rojo" vs "rojoi". 
  • Contaminaciones: son alteraciones de la lecto-escritura en las cuales se escriben las palabras o términos unidos. Por ejemplo: "todo el día" vs "todoeldía"
  • Distorsiones: hace referencia a manifestaciones escritas que resultan ininteligibles, difíciles de leer o entender.
  • Disociaciones: consiste en realizar una separación de las palabras que no va acorde a instrucciones dadas. Por ejemplo: "cara" vs "ca ra", "perro" vs "per ro", "cosa" vs "co sa".
Causas (Jiménez, 2012)
Por muchos años se ha investigado cuáles son las causas de la dislexia. De hecho, mediante la utilización de varios métodos se han descubierto muchos hallazgos que explican el trastorno. Por ejemplo: la disección de cerebros post mortem demostró que las personas con este trastorno presentan una asimetría en áreas temporales, es decir que hay diferencias en el tamaño, forma y posición, en comparación con sujetos normolectores o sin dislexia. 

Adicionalmente, las técnicas de registro, en concreto la magnetoencefalografía (MEG), resonancia magnética funcional (RMF) y tomografía por emisión de epositrones (PET), han permitido descrifrar cuáles son las áreas del cerebro que se encargan del procesamiento de la lectura, las cuales son: el circuito dorsal, el circuito ventral y el circuito frontal inferior, todas en el hemisferio izquierdo. 

El circuito dorsal hace referencia a estructuras de la corteza temporo-parietal y está vinculado con el  "procesamiento del lenguaje" (p, 88), con el "procesamiento fonológico automático" (p, 88) y el "acceso léxico" (p, 88). Por otro lado, el circuito ventral está localizado en la corteza temporo-occipital y basal temporal, por lo cual se relaciona con la identificación de las letras o conjunto de letras (palabras). Por último, el circuito frontal inferior está involucrado en la producción oral de la lectura. 



Llegado a este punto, los pacientes con dislexia presentan desconexiones en estas áreas mencionadas, lo cual genera alteraciones cognitivas en procesos como la velocidad de procesamiento, en la automatización (realizar una lectura rápida aprendida), el procesamiento temporal, conciencia fonológica y percepción visual. 


Por último, estas alteraciones o desconexiones cerebrales pueden deberse a múltiples factores. Por ejemplo: 
  • Factores hereditarios o genética
  • Lesiones cerebrales
  • Estimulación cognitiva y de comunicación pobre.
Diagnóstico
Para realizar el diagnóstico de la dislexia se evalúan varios procesos cognitivos, los cuales son la percepción visual, atención focalizada, memoria procedimental y secuencial, lenguaje, lateralidad y orientación espacial. Adicionalmente, se evaluarán destrezas psicomotrices como el equilibrio, el tono muscular, la independencia motriz y coordinación. Por estos motivos, se realiza una evaluación neuropsicológica, fonoaudiológica, fisioterapéutica y por terapia ocupacional. Adicionalmente, se deben descartar la existencia de otros problemas o trastornos que estén causando las dificultades lectoras. Por lo cual, se debe requerir la participación de un neuropediatra que realice un examen físico del paciente. Asimismo, la aplicación de pruebas visuales, auditivas y cognitivas, entre ellas la visiometría, audiometría y potenciales evocados. 

Tratamiento
El tratamiento del paciente con dislexia se realiza con base a las necesidades del paciente, lo que significa que se observan las dificultades, no sólo lectoras, sino todas las que están presentes y se tratan dependiendo del profesional que las pueda atender. Por ejemplo: el neuropsicólogo se encargará de rehabilitar los procesos cognitivos, entre ellos la atención, memoria, percepción, etc. Por otro lado, el fonoaudiólogo se encarga de los procesos relacionados con la comunicación, es decir lenguaje, lecto-escritura, voz, habla, audición, entro otros. Adicionalmente, el terapeuta ocupacional se dedica a trabajar funciones relacionadas con los quehaceres diarios y que requieren de integración sensorial y motricidad. Por último, el fisioterapeuta o terapeuta físico empleará técnicas que permitan mejorar procesos de movilidad que se alteran ante problemas como hipotonía, hipertonía o problemas en el equilibrio. 

Bibliografía
  • Castillero, O. Dislexia: Causas y síntomas de las dificultades de leer. Psicología y mente. Recuperado de: https://psicologiaymente.com/desarrollo/dislexia (De aquí se extrajo una imagen)
  • Cognifit. Dislexia infantil: Definición, tipos de dislexia, síntomas, tratamiento y ejercicios de entrenamiento cerebral. CogniFit. Recuperado de: https://www.cognifit.com/es/dislexia (De aquí se extrajo una imagen)
  • Jiménez, J. (2012). Dislexia en español: Prevalencia e indicadores cognitivos, culturales, familiares y biológicos, Ediciones Pirámide, Madrid, España.
  • Narvarte, M. (2001). Trastornos escolares: Detección, diagnóstico y tratamiento: Tomo 1, Landeira Ediciones, México